Zapatero

Nos movemos por sensaciones, muchas veces arrastrados por el torrente de juicios de valor que difunden los medios de comunicación. Desde el 2004, le toca Zapatero. Los del PP tienen ganas de gobernar y sólo hay un obstáculo que se lo impide: no obtuvieron la mayoría necesaria para hacerlo. El objetivo, en consecuencia, es doble; desacreditar al que en su día los alejó del poder y ofrecerse como valor seguro. En ese proceso, todo vale: el presidente Zapatero es un imbécil, sus hijas están gordas, su gobierno es inoperante… Se mezclan aspectos políticos con los puramente personales demostrando que el descrédito tiene su fundamento en odios atávicos más que en análisis mesurado de la realidad.

Es cierto que el presidente ha cometido errores y que los seguirá cometiendo porque sólo el que hace corre el riesgo de errar. Es cierto que su gobierno necesita una urgente remodelación sobre todo porque no parece que haya sintonía en el seno del ejecutivo. Es verdad que Zapatero se ha equivocado a la hora de analizar la realidad de un Estado cuya economía está poco diversificada y sostenida sobre todo en el ladrillo de Aznar. Pero ahora toca Europa; una Unión poco sólida gobernada por un triunvirato, una de cuyas patas gestiona nuestro Gobierno. Y a Europa le ha dado también por explicarnos que estamos mal, muy mal. Pese a todo, el presidente no va a remodelar el ejecutivo, dicen. No obstante se ha ido con Obama a rezar a Dios por los necesitados. ¿Y si nombrase ministro de Hacienda al obispo Rouco para resolver la crisis?

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Lo que más me ha decepcionado como español, ha sido ver a los que siempre han ido envueltos con la bandera de España de patriotas, comportarse como sus enemigos, enemigos de todos nosotros, saboteando cualquier solución al problema terrorista en España, en el secuestro del Alakrana mejor no recordarlo y en el momento económico que vive España y todos nosotros, la ayuda a la patria ha sido y es...
Una pena! y todo para intentar el poder ¡que miedo!
arturo

Entradas más populares

Carta a un niño del Colegio Ramón y Cajal (Cuenca)

Carta abierta al Presidente de Castilla-La Mancha

No me rindo