Y tú ahí sin saberlo. ¿Dónde dirás que celebró Aznar su cincuenta y pico cumple el pasado miércoles? Ahora me explico el horrible juego que desplegó el Madrid, si parecían una procesión de cansinos corriendo como tontos por todo el campo, sin freno ni valladar. Total para perder. Y lo peor es que el Jose seguro que está convencido del fulgor de su estrella, de su proverbial importancia ya que con su sola presencia puede cambiar el signo de los tiempos. Lo demostró en las Azores..., no tengo palabras; pero lo que no sabe, el ignorante lo ignora, es que cuando acude a determinados actos deportivos no sé por qué lo gafa todo. Y por si fuera poco dice que se va a integrar en una candidatura para codirigir los destinos (¡vaya toalla!) de lo que fue un gran club de fútbol. Menos mal que no ha intervenido en Castilla-La Mancha, ¿o sí? Y tú ahí, repantingado, sin saberlo. Pues entérate, te lo digo por si quieres cambiar de club; ya sé que es muy duro, que uno cuando nace es de su pueblo y del Madrid, una especie de anatema que lo perseguirá de por vida. No importa, si hay que cambiar, se cambia. Por qué vas a simpatizar con un equipo en cuya junta directiva está este caballero; ni se te ocurra; que no. Pues igual que hiciste cruz y raya al bar de la esquina porque no te atendió como te mereces, igualico, te «descambias» de club y que salga el sol por Antequera. ¿Y adónde voy? ¿Al Barça? Tampoco hay que exagerar.
Y tú ahí sin saberlo. ¿Dónde dirás que celebró Aznar su cincuenta y pico cumple el pasado miércoles? Ahora me explico el horrible juego que desplegó el Madrid, si parecían una procesión de cansinos corriendo como tontos por todo el campo, sin freno ni valladar. Total para perder. Y lo peor es que el Jose seguro que está convencido del fulgor de su estrella, de su proverbial importancia ya que con su sola presencia puede cambiar el signo de los tiempos. Lo demostró en las Azores..., no tengo palabras; pero lo que no sabe, el ignorante lo ignora, es que cuando acude a determinados actos deportivos no sé por qué lo gafa todo. Y por si fuera poco dice que se va a integrar en una candidatura para codirigir los destinos (¡vaya toalla!) de lo que fue un gran club de fútbol. Menos mal que no ha intervenido en Castilla-La Mancha, ¿o sí? Y tú ahí, repantingado, sin saberlo. Pues entérate, te lo digo por si quieres cambiar de club; ya sé que es muy duro, que uno cuando nace es de su pueblo y del Madrid, una especie de anatema que lo perseguirá de por vida. No importa, si hay que cambiar, se cambia. Por qué vas a simpatizar con un equipo en cuya junta directiva está este caballero; ni se te ocurra; que no. Pues igual que hiciste cruz y raya al bar de la esquina porque no te atendió como te mereces, igualico, te «descambias» de club y que salga el sol por Antequera. ¿Y adónde voy? ¿Al Barça? Tampoco hay que exagerar.
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